En 1928 Tiro Federal de Rosario jugó ante un Talleres que tuvo que pedir camisetas prestadas para la ocasión por lo que Alem le cedió sus remeras para salir a la cancha vestido de rojo. En 1951 la utilería recibió el primer juego de camisetas diseñado para evitar especulaciones a la hora de enfrentar a rivales donde los colores se tornaran confusos. Por la cuarta fecha del Oficial de la LCF, Talleres y Racing jugaron un partido en La Boutique (empataron 4-4) en donde el equipo de Talleres se vistió por primera vez con una casaca completamente azul.